Dijo Ikeda que cuando existe amor y además, hay paciencia,
es imposible conocer los límites. De hecho, una diferencia entre amor y
felicidad, es que el primero, no entiende de limitaciones porque todo lo puede.
Cuando comprendemos el verdadero significado de la palabra
amor, la vida no solo cobra sentido pleno sino que nos ayuda a ser un poco más
felices en compañía de esa persona. Así, llegamos a entender a la perfección que la diferencia entre amor y felicidad reside fundamentalmente en que ambos términos, han de ser comprendidos como complementos el uno del otro.
El amor es:
- Aprender a ser pacientes.
- Respetuosos con la persona con la que decidimos compartir todo tipo de vivencias.
- Un ingrediente indispensable que forma parte de nuestro código genético, porque sin amor es imposible alcanzar una vida completa.
- Recoger alegrías.
- Conquistar metas juntos.
- Caminar unidos de la mano por la calle.
- Una semilla con la que afrontar todo tipo de retos, con la seguridad que aporta el saber que no estamos solos en el mundo.
- Recibir un abrazo cuando más lo necesitamos.
- No llorar solos si sentimos que el mundo o las circunstancias pueden con nosotros.
- Bienestar inimaginable.
- Una sonrisa infinita llena de brillo, de esas que simplemente enamoran.
En definitiva, es la construcción de un proyecto de vida en
común, entre dos personas.
La felicidad es:
- Todo lo anteriormente expuesto, puesto que es imposible ser plenamente felices cuando no existe amor dentro de sus múltiples concepciones.
Tanto si estás enamorado como no, no debes olvidar que la única
energía capaz de derribar cualquier muro, superar todo tipo de circunstancias y
que verdaderamente, nos hace más fuertes, es el amor. Por eso:
- Ama sin límites.
- Respeta aunque te duelan las diferencias decisiones que pueda escoger la otra parte.
- Quiere hasta la saciedad.
- Ponte en el lugar del otro.
- Piensa antes de decir nada.
- Sonríe y se feliz al lado de esa persona que escogiste como compañera de viaje.
Pero recuerda, hagas lo que hagas, no te olvides de ser feliz en ese instante, puesto que la vida consiste en eso: coleccionar pequeños o grandes momentos.
Ahora tú, ¿estás de acuerdo en que ambos conceptos se complementan?