¿Trae el dinero la felicidad? quiere responder tus
dudas sobre las implicaciones que tiene la economía sobre la posibilidad de ser
felices.
En esta ocasión me gustaría dar respuesta a una de las
preguntas que desde el principio de los tiempos, viene rondando la mente del
ser humano y aún a día de hoy lo sigue haciendo, ¿trae el dinero la
felicidad?
Hace pocos días, recibí un mensaje en la red social Twitter por
parte de una lectora habitual, que la llamaremos si te parece María, de este
rincón para ser felices, en el cual me exponía un problema que tenía acerca de
las dificultades que tenía para llegar a final de mes y se preguntaba, ¿cómo
era posible que pese a tener dos carreras no encontrase trabajo y solamente
entrase un salario en su hogar?
Después de analizar diversos indicadores económicos, he
llegado a la conclusión de que el problema tiene que ver con la mentalidad que
nos han inculcado quizás desde pequeños en las propias escuelas, nuestros
hogares y otros aspectos. Por este motivo, me gustaría compartir contigo estas
líneas en las que trataré de darte la respuesta a la difícil pregunta de si ¿trae
el dinero la felicidad?
¿Es posible que el dinero traiga la felicidad?
Dijo Groucho Marx en su día que la felicidad se componía de
pequeñas cosas: un pequeño yate, una pequeña mansión, una pequeña fortuna. En
mi opinión, nos enfrentamos a un problema muy serio, de nombre dinero, que está
arruinando en todos los aspectos las vidas de millones de personas en todo el
mundo.
No tenemos que irnos demasiado lejos, para comprobar como
sin ir más lejos, el salario mínimo de diferentes países en el pasado año 2014 como
por ejemplo:
- Albania: 157 euros.
- México: 99 euros.
- España: 757 euros.
Mientras que por otro lado, tenemos otros países en los que
el salario mínimo es por ejemplo:
- Luxemburgo: 1923 euros.
- Alemania: 1473 euros.
- Francia: 1458 euros.
En definitiva, obtenemos las siguientes conclusiones:
- Uno de los problemas más terribles a los que nos enfrentamos, es el dinero.
- Millones de personas sobreviven en condiciones de la más absoluta precariedad, sin contar las que directamente no tienen recursos.
- Seguimos gastando miles de millones en compras que no necesitamos, mientras cientos de personas en todo el mundo padecen dificultades graves.
El dinero no trae la felicidad, la resta considerablemente. Lo único
que pretendo con este artículo es que a partir de hoy, trates de ser un
poco más ético en tus compras, valores el dinero que tienes en tus manos y
sobre todo, tengas bien presente a todos aquellos millones de personas que
sobreviven con mucho menos de lo que tienes tú.