Alcanzar la felicidad se está convirtiendo en un reto
para millones de personas en el globo. Si tenemos en cuenta que existen
diferentes concepciones del término y todas ellas, responden a variables
diversas su estudio se complica.
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| Alcanzar la felicidad es fácil cuando comprendemos que el control de nuestras circunstancias camina al lado de entender que somos dueños de nuestras emociones. |
Como bien supones, podemos llegar a conocer la felicidad como concepto total y entender que de la mano de ella todo nos resultará mucho más sencillo. Si te parece, comenzaremos por el principio. Para ello te invito a responder a dos cuestiones muy fáciles que son:
- ¿Cómo alcanzar la felicidad?
- ¿Cómo podemos ser felices en un mundo en ocasiones igual demasiado loco?
Lo se, son dos preguntas que aunque en apariencia pudieran parecer sencillas de contestar, tienen su cierta complicación. ¿Alguna vez reflexionaste para tu ser sobre ellas? Fuera como fuese, si quieres aprender más acerca de otras dudas te invito a que visites este otro tema llamado preguntas sobre felicidad
Bien, teniendo en cuenta lo anteriormente expuesto en cuanto
a la felicidad plena, tengo que decirte que lo siento pero no es ningún mito.
Lo que está fuera de toda lógica razonable en mi opinión, es negar la
existencia de esta posibilidad tan beneficiosa, maravillosa y por supuesto
recomendable para la existencia de todos los seres vivos.
- ¿Y si mi vida es demasiado difícil?
- ¿También puedo convertirme en una persona feliz o ser feliz pese a mis circunstancias?
Alcanzar la felicidad no responde a circunstancias porque es una actitud. Aquellos que desconfían del término o incluso podría ser que de ellos mismos, negarán su existencia. Los demás, una mayoría de individuos, dedicarán parte de sus esfuerzos para tener la vida que merecen, sabiendo valorar y dando sentido a su vida.
Decir adiós a excusas sin fundamento alguno
Puedo asegurarte que alcanzar la felicidad depende de
nosotros mismos, sí, contamos con la posibilidad o no de ser mucho más felices.
Sin embargo, sucede una circunstancia que merma notablemente estas opciones de
tener lo que queremos: las excusas.
Si me lo permites te lo explicaré muy brevemente. Hay
personas y seguramente tú conozcas algunas de ellas que básicamente vienen a
negar la objetividad de disfrutar de este estilo de vivir, lo tachan de
imposible, irreal y se auto-justifican para negar su realidad.
Esta postura tiene su parte de comprensión, cuando
cualquiera de nosotros no consigue aquello que se propone, aún a sabiendas que
realmente depende de él mismo en una primera instancia, tiende a sentir un
sentimiento de inferioridad que implica un gran número de emociones negativas
para su yo interno. Es decir, es consciente de que otros seres vivos se
encuentran un peldaño por encima de él conforme a otras percepciones personales
como pudieran ser las siguientes:
- Sentimiento de alegría.
- Vivir en la mayor plenitud que podamos.
Por otro lado, cuando cualquiera de las otras personas que tenemos a nuestro alrededor, nosotros mismos o quien tú prefieras, se impone hacia su ser una excusa para la no consecución de un algo determinado, por medio de imponerse aquella excusa y creer dicha falsedad consigue alimentar su ego.
- ¿Y tú, que postura adoptas con una mayor frecuencia?
Alcanzar la felicidad tal y como estás comprobando en estas líneas depende de nuestra actitud y la forma que tengamos de comprendernos a nosotros mismos y todo aquello que nos rodea. De tal modo que es realmente posible ser feliz en un mundo a veces cruel, que lastima a los más vulnerables.
- ¿Sabes cómo conseguirlo?
Efectivamente, comenzando por conocerse a uno mismo. Recuerda que puedes ser feliz con lo poco o mucho que tengas, si eres consciente que todos nosotros somos valiosos y dedicas tus esfuerzos a proporcionarte el pleno control de tu existencia. No existe mejor forma o al menos yo no la conozco de solucionar los problemas que pudieras tener que haciéndolo desde la más absoluta convicción.
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